
viernes, 5 de junio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Sueña un sueño despacito, entre mi manos, hasta que por la ventana suba el sol.
Máma la libertad siempre la llevarás dentro del corazon. Te pueden corromper, te puedes olvidar pero ella siempre está.
Los adoquines, las hojas secas en el cordón, el viento que arrastra el humo y el pelo volando atrás son una maravillosa representación de la que no tiene que ser pálida, la resistencia.
ResponderEliminar